Roel Romero, propietario del hotel Urán en San Gerardo de Rivas era uno de los primeros en comprar el nuevo calentador de agua que Purasol empezó a distribuir hace poco. “Tenemos el calentador instalado en la zona donde los cuartos tienen los baños compartidos y donde pueden alojarse unas 20 personas y hasta ahora nunca nos ha fallado. Claro, por la noche tenemos que utilizar el respaldo eléctrico porque si todos se ponen a duchar después de las 4 de la tarde un tanque de 200 litros no da abasto.”

Este hotel que se inauguró hace 16 años en la entrada del Parque Nacional Chirripó es una empresa familiar con una plantilla fija de 10 personas y ofrece, aparte de alojamiento para 60 personas en cuartos o cabañas, los servicios de restaurante. Desde hace más de 4 años cuenta con la Bandera Azul y el año pasado obtuvieron el CST de nada menos de 4 hojas, un distintivo del ICT (Instituto Costarricense de Turismo) que galardona a hoteles de comportamiento ecologista. “La implementación de energías renovables nos ayuda para obtener estos distintivos”, comenta Roel Romero, “pero no sólo es por razones ecologistas que instalé un calentador de agua solar. Hubo igualmente razones económicas y de hecho después de la puesta en marcha del calentador, nuestra factura del ICE bajó en unos 25.000 colones por mes a pesar de tener que utilizar el respaldo eléctrico por la noche.
“Decidimos comprarle el calentador a Purasol por ser empresa del cantón y por ofrecer un precio muy asequible” añade este joven hotelero contestando a la vez las llamadas entrantes para las reservas de Semana Santa. “Vamos a estar completo y los clientes van a tener ducha muy caliente”, concluye muy contento.